A modo de bodegón holandés, hoy os presento esta tarta no apta para todos los públicos, ya que lleva un poquito de coñac. (Se puede hacer también sin). La receta es mía y os la dejo al final del post. La mezcla del chocolate con la mandarina es un lujazo para el paladar ...
Decidí decorarla al final con unos gajos de mandarina que le aportaron un poquito de color.